¿Harás un video corto? Diseña el guion adecuado

Escrito por: Georgina Rodríguez

Es increíble todo lo que puedes transmitir con un video, pero lo más importante es el vínculo que estableces con el público meta más valioso: tus alumnos.

Para comenzar con el pie derecho, planea tu guion

Como recurso educativo, un video es muy útil para transferir información a la mente de tus estudiantes, ya que pone en marcha dos de los cinco sentidos: el visual y el auditivo. A continuación te describimos cómo desarrollar de forma sencilla tus propios guiones de videos cortos.

Antes de empezar a escribir el guion, debes reflexionar cuál es la intención de hacer el video, qué información va a contener, y cuál será el canal de difusión, la duración aproximada y las características o perfil de la audiencia. Las siguientes preguntas te servirán como guía:

Hacerte esta pregunta te ayudará a analizar y decidir si un video es la mejor forma de transmitir tu mensaje. Además, debes tener en cuenta el tiempo que llevará producirlo.

Contestar estas dos preguntas te dará la pauta para seleccionar el contenido o la información específica que incluirás en el video. Así mismo, en este punto puedes decidir si utilizarás la técnica de storytelling (el arte de contar historias), para representar tu video. Puedes ubicar tu video en alguna de las siguientes clasificaciones:

Video introductorio. Este tipo de video se utiliza para presentar algo nuevo y causar curiosidad entre el público; por tanto, suelen incluir pocos detalles.
Video tutorial. A diferencia del anterior, este video el video tutorial incluye contenido muy detallado; pues a menudo se utiliza para explicar procesos o el funcionamiento de las cosas.
Video demostrativo. Su estructura es similar a la del video tutorial, pero se enfoca más en mostrar los beneficios de algo y comprobar que es realmente efectivo.
Video de formación. Este tipo de video se utiliza para dar una explicación completa o detallada acerca un tema en particular.

Debes tener en cuenta el medio por el cual difundirás tu video, ya que esto puede impactar en la duración o peso permitido, tipo de ilustraciones, e incluso el audio o voz en off que se utilizará.

Hoy en día, lo más recomendable es utilizar videos cortos con duración aproximada de entre 1 y 1.5 minutos. Si la naturaleza del video exige más tiempo, será importante cuidar el cambio de estímulo y utilizar estrategias para mantener el interés de los espectadores.

Es indispensable identificar el público o la audiencia a quien va dirigido tu video, para que puedas usar un lenguaje e imágenes adecuados.

Existen diversas clasificaciones; lo mejor será ubicar cuál de ellas es la más indicada e investigar cuáles son sus características principales.

A continuación se muestran algunos ejemplos:

Por generación: Generación Z, millennials, generación X, baby boomers
Por área de interés: Ciencias, humanidades, finanzas, política
Por edad: Menos de 10 años, 10-15 años, 16-25 años, 26-35 años, más de 36 años
Por nivel educativo: Primaria, secundaria, preparatoria, profesional, posgrado

Una vez que hayas reflexionado sobre las preguntas anteriores, es momento de elegir la mejor combinación de características para tu video.

Con animaciones
Con actores
Con experto a cuadro

Contar una historia
No contar una historia

Hasta 1 minuto
Entre 1 y 3 minutos*
Entre 3 y 5 minutos*

* Si seleccionaste alguna de estas opciones, deberás tener cuidado en mantener el estímulo a lo largo de todo el video, pues se podría perder fácilmente la atención del público o confundirlo. Si no es posible acortar el tiempo del video, debes justificar muy bien el uso del tiempo. Recuerda que hoy en día, hay muchos distractores y, si realizas un video muy extenso, será muy fácil que el público se distraiga.

Voz en off
Música de fondo
Texto en pantalla

Ahora deberás pensar en la estructura que tendrá el video: introducción, cuerpo, conclusión, y llamado a la acción. Para esto se sugiere:

Tener listo el contenido que quieres transmitir.
En caso de haber seleccionado storytelling, pensar en una historia que se pueda adaptar.
Identificar las posibles imágenes o escenas del video.

Una vez que ya cuentas con todo esto, es momento de empezar a construir el guion. Lo más recomendable es trabajar con un formato o plantilla, pues sin importar si serás tú mismo quien realizará el video o alguien más, esto te ayudará a mantener organizada la información e ideas.

Ahora sí, ¡elabora tu guion!

A continuación te presentamos un ejemplo de guion, junto con el video finalizado. Los elementos que encontrarás en la plantilla son los siguientes:

Texto en pantalla: Es el texto que deberá aparecer durante la escena. Te recomendamos que sean palabras o frases cortas.
Voz en off: Es la voz del narrador; si serás tú mismo, recuerda hacer pausas y cuidar la entonación.
Imagen: Aquí debes plasmar cómo te imaginas el video, escena por escena. Puedes representarlo con dibujos, imágenes de internet o simplemente la descripción detallada de lo que imaginas.
Duración aproximada. Es la duración que estimas por cada escena.

Este es un ejemplo de una plantilla de guion terminada, lista para comenzar a hacer un video:

haras-un-video-corto-diseña-el-guion-adecuado-ejemplo-guion

Descarga aquí la plantilla de guion, para que puedas utilizarla. También puedes obtener otras plantillas de guion en los formatos descargables.

A continuación podrás ver el video terminado, con base en el guion anterior. ¿Qué te parece?

Ver video

Recuerda que hoy en día los recursos audiovisuales forman parte de las actividades cotidianas; la mayoría de la gente está rodeada por este tipo de recursos. Con el uso de esta guía podrás desarrollar un guion de excelente calidad que resultará en un video de valor para tus estudiantes.

Referencias

Condusef (s.f.) Finanzas y generaciones. Recuperado de https://goo.gl/1892RE
Barros, C. y Barros, R. (2015). Los medios audiovisuales y su influencia en la educación desde alternativas de análisis. Recuperado de https://goo.gl/FS9aqL

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